Córdoba, capital cultural

domingo, 3 de octubre de 2010

CÓRDOBA se acercó el jueves por la tarde a su sueño de convertirse en capital cultural de Europa en el año 2016.

El comité de preselección, compuesto a medias por representantes de la UE y del Ministerio de Cultura, realizó la primera criba entre las ciudades españolas aspirantes y seleccionó a seis de las candidatas: Córdoba, Burgos, Las Palmas, San Sebastián, Segovia y Zaragoza.

A mediados del año próximo se decidirá quién es la ganadora, y el trabajo consiste en conseguir que lo sea la capital cordobesa. Es un trabajo colectivo. No implica solamente a la sociedad cordobesa, sus instituciones y autoridades, auténtico motor hasta ahora de un proyecto que nació ya en 2002, que ha logrado la adhesión individual de 135.000 personas y que ha despertado la ilusión generalizada de los cordobeses.

Desde el momento en que Córdoba ha sido preseleccionada y que la otra candidata andaluza, Málaga, ha quedado descartada en esta ocasión, no cabe más que la transformación de la candidatura cordobesa en candidatura andaluza. Córdoba es, desde ahora, la propuesta de Andalucía a la Capitalidad Europea de la Cultura en 2016.

Así lo han entendido el alcalde de la ciudad, Andrés Ocaña, quien ha subrayado su voluntad de imprimir a la nominación cordobesa y a su organización un sesgo regional, y el de Málaga, Francisco de la Torre, que en un gesto que le honra ha mostrado su apoyo a la coyunturalmente ciudad rival, pero hermana por tantos conceptos. Y así debe entenderlo toda Andalucía, empezando por la Junta, su máxima institución de autogobierno, que habrá de volcarse en defensa e impulso de Córdoba 2016. Los ocho años transcurridos desde que se lanzó la idea han logrado ya no sólo revitalizar el panorama cultural de la capital, sino también crear un sueño colectivo y articular un proyecto con el que los cordobeses se han sentido plenamente identificados. Hace falta, ahora, que los andaluces de todas partes sean partícipes de este sueño y este proyecto y, con sus instituciones al frente, sean capaces de hacerlos propios, consolidarlos, difundirlos e impulsarlos a todos los niveles.

En realidad, el trabajo duro empieza ahora. Hay que superar a cinco ciudades españolas que buscan el mismo blasón de representar a la Europa de la cultura dentro de seis años, pero carecen de la historia, la tradición y la proyección de Córdoba. Hay que hacer realidad el sueño.

Fuente:http://www.diariodesevilla.es

Córdoba pasa el corte de la capitalidad cultural y Málaga se queda fuera para la capitalidad europea de la cultura 2016



Córdoba ha pasado el primer corte para su elección como Capital Europea de la Cultura 2016, mientras que Málaga se queda fuera. El presidente del comité de preselección ha anunciado esta tarde el nombre de las seis ciudades españolas que seguirán adelante en sus aspiraciones, junto a Córdoba.

El presidente del Comité de preselección de la Capital Europea de la Cultura 2016, Manfred Gaulhofer, ha anunciado esta tarde que las ciudades de Córdoba, Burgos, San Sebastián, Las Palmas de Gran Canaria, Segovia y Zaragoza han pasado el primer corte para optar a este título dentro de cuatro años. Gaulhofer ha dado a conocer en una conferencia de prensa el veredicto del comité de preselección, formado por seis representantes del Ministerio de Cultura y siete de la Comisión Europea.

El comité ha evaluado durante tres días los proyectos de quince ciudades españolas, después de dejar fuera a la de Palma de Mallorca por un defecto de forma. Entre ellas estaban las andaluzas de Córdoba y Málaga, que finalmente se quedará fuera del proceso de selección.

Dentro de nueve meses el jurado volverá a reunirse para elegir entre las preseleccionadas a la ciudad candidata, que será presentada a las instituciones europeas para que, posteriormente, el Consejo de Ministros de la Unión Europea designe de forma oficial a las dos ciudades que llevarán el título cuatro años más tarde.

Los trece miembros del jurado han quedado "muy impresionados" con las candidaturas y propuestas y han reconocido que muchas de las ciudades han invertido "esfuerzo, dinero y tiempo" en la preparación de sus proyectos, ha explicado el presidente.

Tras indicar que la Capital Europea de la Cultura es una de las iniciativas más emblemáticas de la Unión Europea en el área de cultura, el jurado entiende que aunque una ciudad no llegue a la fase final el simple ejercicio de presentar la propuesta da importancia a la cultura en esas ciudades.

Todas las candidaturas han destacado la alta participación y el apoyo de los ciudadanos y todas las ciudades han mencionado su intención de que la cultura sea un foco central en el futuro, ha explicado Gaulhofer.

Ha resaltado el portavoz del citado comité que las seis finalistas han sido elegidas después de un proceso "muy largo", debates "muy intensos" de los delegados en los últimos días y una evaluación "muy rigurosa" de todos los elementos a tener en cuenta.

Una vez que la lista se apruebe por el Ministerio de Cultura, tendrán que modificar sus solicitudes basándose en las recomendaciones del Comité para participar en la fase final que se celebrará a mediados de 2011

"Sensación agridulce" en la Junta

El consejero de Cultura, Paulino Plata, ha reconocido que la Junta de Andalucía tiene una sensación "agridulce" tras la preselección de Córdoba y la eliminación de Málaga para optar a la Capital Europea de la Cultura en 2016, y pide "volcarse" con la primera para que sea finalmente la elegida.

En este sentido, el consejero de Cultura ha dicho que en este momento la Junta tiene una sensación "agridulce" porque está la alegría de que Córdoba lo haya superado pero también la "tristeza" por que Málaga no lo haya logrado.

Paulino Plata ha admitido que pensaba que ambas ciudades tenían posibilidades de superar el corte a raíz de comprobar "el documento y la presentación" que hicieron, y ha señalado que en el caso de Málaga es el momento de analizar "qué es lo que ha pasado, de aprender de lo que se ha hecho" para que optar con más fortaleza en otra ocasión a este evento o "cualquier otro" al que aspire.

Enorme satisfacción en Córdoba

Mientras tanto, en la ciudad de Córdoba la satisfacción es notable. El presidente de la Diputación Provincial de Córdoba, Francisco Pulido, ha manifestado su alegría porque Córdoba haya sido preseleccionada para la Capitalidad Cultural Europea en 2016 y ha indicado que la misma ubica a la ciudad "en un ámbito europeo".

El dirigente provincial ha valorado el "trabajo bien hecho" y ha confiado en la capacidad de "afrontar el futuro". Además, para Pulido los municipios de toda la provincia "sueña" con Córdoba y se suman a su proyecto para hablar de cultura"y para rentabilizar sus opciones de favorecer la "construcción de Europa".

Mientras, la gerente de la Fundación Córdoba Capital Cultura, Carlota Álvarez Basso, ha sido una de las más entusiastas y no ha disimulado su satisfacción por haber dado este paso en la carrera hacia 2016.

Fuente:http://www.andaluciadeviaje.es

Córdoba pasa el corte de la capitalidad cultural

Las finalistas españolas también son Burgos, Las Palmas, San Sebastián, Segovia y Zaragoza

El presidente del comité de preselección de la Capital Europea de la Cultura 2016, Manfred Gaulhofer, anunció ayer que las ciudades de Burgos, Córdoba, San Sebastián, Las Palmas de Gran Canaria, Segovia y Zaragoza han pasado el primer corte para optar a este título dentro de cuatro años. Fuera de las candidaturas han quedado, en este primer corte, Málaga, Cáceres, Santander, Oviedo, Alcalá de Henares y Pamplona.

Gaulhofer dio a conocer en una conferencia de prensa el veredicto del Comité de preselección, formado por seis representantes del Ministerio de Cultura y siete de la Comisión Europea. El Comité ha evaluado durante tres días los proyectos de quince ciudades españolas, después de dejar fuera a la de Palma de Mallorca por un defecto de forma.

Dentro de nueve meses el jurado volverá a reunirse para elegir entre las preseleccionadas a la ciudad candidata, que será presentada a las instituciones europeas para que, posteriormente, el Consejo de Ministros de la UE designe de forma oficial a las dos ciudades definitivas.

Fuente:http://www.europasur.es

Miguel Reina

lunes, 5 de julio de 2010

Miguel Reina Santos fue un futbolista español. Nació en Córdoba. Jugaba de portero y su primer equipo fue el Córdoba Club de Fútbol.


Biografía:

Empezó jugando en las categorías inferiores del Córdoba Club de Fútbol hasta 1964, año en el que debuta con el primer equipo. Debutó en la Primera división española el 11 de octubre de 1964 en el partido Córdoba 2:0 Elche. Con este equipo juega dos temporadas.

En 1966 ficha por el FC Barcelona. En su primera temporada en su nuevo club casi no dispone de oportunidades, sólo juega dos partidos de liga. Ese mismo año consigue un subcampeonato de liga, repitiendo subcampeonato en las temporadas 67-68, 70-71 y 72-73. Con el FC Barcelona gana dos Copas del Generalísimo y la Copa de campeones de Ferias, campeonato que otorgaría al FC Barcelona la Copa de Ferias en propiedad. En su última temporada en el club (72-73) Reina consigue el Trofeo Zamora al encajar 21 goles en 34 partidos de liga. Además esa temporada consigue estar 824 minutos sin encajar un gol, convirtiéndose en el portero del FC Barcelona que más tiempo ha permanecido imbatido.

Un hecho curioso de su etapa en el FC Barcelona fue que el entrenador del equipo, Vic Buckingham, alineó a Reina solo en los partidos que se dispuaton fuera del Camp Nou en la temporada 70-71, ya que en el feudo barcelonista Reina era abucheado por los aficionados por una desafortunada actuación del portero en un partido contra el Dínamo Moscú FC.

En 1973 ingresa en las filas del Club Atlético de Madrid. Con este equipo consigue un subcampeonato de Liga en su primera temporada. Con el Club Atlético de Madrid ganó una Copa del Rey y una Liga en la temporada 76-77, en la que además Reina consiguió el Trofeo Zamora al encajar 29 goles en 30 partidos. Participó con su club en la final de la Copa de Europa que su equipo perdió contra el Bayern de Munich en la temporada 73-74. Además conquistó en la temporada siguiente una Copa Intercontinental con su club.

Reina se retiró de los terrenos de juego al final de la temporada 79-80. Disputó un total de 312 partidos en primera división.

Reina es el padre del jugador del Liverpool FC Pepe Reina, también portero.

Selección Nacional:

Ha sido internacional con la Selección de fútbol de España en cinco ocasiones. Su debut como internacional fue el 15 de octubre de 1969 en el partido España 6:0 Finlandia.



Leyenda de los comendadores de Córdoba

viernes, 18 de junio de 2010

La Leyenda de los comendadores de Córdoba está basada en un hecho histórico ocurrido en 1448 en la ciudad de Córdoba. El protagonista fue Fernando Alfonso de Córdoba, caballero Veinticuatro de la ciudad, quién asesinó a su esposa y a los dos caballeros que la habían seducido, Jorge Solier, comendador de Cabeza del Buey y Fernando Alfonso de Córdoba, comendador de Moral, ambos caballeros de la orden de Calatrava. La venganza de Fernando Alfonso también alcanzó a otros personajes, entre otros a varios criados.

El protagonista de la leyenda, Fernando Alfonso de Córdoba, yace hoy sepultado en la Capilla de San Antonio Abad de la Mezquita-Catedral de Córdoba, habiendo fallecido en la ciudad de Córdoba en el año 1478.

La historia y la leyenda

Fernando Alfonso de Córdoba era uno de los caballeros más relevantes de la ciudad de Córdoba. Destacaba por sus enormes posesiones y su inmensa fortuna. Además, gozaba de la amistad del rey Juan II de Castilla, padre de Isabel la Católica, lo cual le proporcionaba una sólida y respetable posición en la corte castellana.

Fernando Alfonso estaba casado con Beatriz de Hinestrosa, dama muy joven y de extremada belleza. Amaba a su esposa con igual apasionamiento que el día de su boda, y ella ejercía tal predominio sobre él, que era capaz de trocar el carácter guerrero y agresivo de su esposo, a poco que se lo propusiera, por otro más dulce, agradable y cordial, convirtiéndole en un persuasivo y sagaz diplomático.

Beatriz era envidiada por todas las mujeres de Córdoba a causa de su extraordinaria hermosura y a causa del amor que le profesaba su marido, que era absoluto e inquebrantable. Pero, sobre todo, la ilustre señora era muy tenida en cuenta a causa de la vida lujosa y encumbrada que había alcanzado con su matrimonio. A pesar de aquella regalada existencia, la pareja tan dichosa compartía una frustración, y era la de no haber tenido hijos. Ello enturbiaba la felicidad del matrimonio.

Cuentan las crónicas que hicieron todo lo posible y lo imposible por lograr descendencia, desde solemnes votos y promesas religiosas hasta conjuros de adivinos orientales y sortilegios de hechiceros mahometanos. Claro está que esto último les llenaba de remordimientos, pues sabían que se salían del marco religioso de sus vidas, pero confiaban en que la misericordia de Dios los perdonara, en aras de la búsqueda de legítimos herederos que, al propio tiempo, habrían de ser fieles cristianos.

Sin embargo, todo fue inútil. Fernando Alfonso, desengañado de brujos y doctores, pensó que tenía que confiar más en su amor y en la naturaleza y, convencido de que estas causas naturales se incrementarían en su palacio y en sus fincas de Córdoba, se resolvió a marcharse de la corte y volver a su ciudad para no separarse de su esposa, y vivir su unión matrimonial alejado de las perturbaciones políticas y cortesanas. El monarca castellano, que como es sabido le tenía en gran estima, no quiso dejarle marchar sin entregarle un regalo que le sirviera como recuerdo de aquellos tiempos pasados junto a su rey. Se trataba de un valiosísimo anillo, primorosamente trabajado, que se distinguía por ser una verdadera obra de arte. El profundo amor que el caballero cordobés dispensaba a su esposa se puso de manifiesto en esa ocasión, ya que le entregó a ella el anillo que le había regalado Juan II de Castilla.

No llevaban mucho tiempo en Córdoba, llevando una vida retirada, cuando un día recibieron la visita de sus primos, los comendadores Fernando Alfonso de Córdoba y Solier y Jorge de Córdoba y Solier, ambos hermanos del obispo de Córdoba Pedro de Córdoba y Solier. Ambos visitantes eran caballeros de la Orden de Calatrava y cada uno de ellos era comendador en una localidad, siendo Fernando Alfonso comendador del Moral y Jorge comendador de Cabeza del Buey.

Los dos jóvenes comendadores de Calatrava eran tan apuestos y gallardos como atractivos y cortesanos. Eran hermanos gemelos y había tanta semejanza entre ellos que incluso su mismo padre se veía en la imposibilidad de distinguirlos. Beatriz se apresuró a festejarlos y a dedicarles todas las atenciones que le fuera posible, pues no deseaba regatear ningún agasajo a aquellos destacadísimos familiares de su esposo. Así pues, las fiestas y banquetes en honor de los calatravos se fueron sucediendo y en todo momento presidía tales acontecimientos Beatriz.

Sin poder evitar el efecto que la hermosa dama causaba en su alma, el comendador Jorge, que no podía quitarle sus ojos de encima, se enamoró perdidamente de ella y muy pronto el amor por ella pasó a ser una incontrolable pasión. Los comendadores continuaron durante algún tiempo en Córdoba, y nada hacía pensar en que Jorge tuviera ni siquiera la posibilidad de declararle sus sentimientos a la bella mujer de su primo. Pero un acontecimiento totalmente imprevisto modificó sustancialmente las circunstancias de los protagonistas de esta historia.

Ocurrió que el Ayuntamiento de Córdoba tuvo que hacer una importantísima petición al rey Juan II de Castilla y como la persona más idónea para acelerar la gestión era el caballero Veinticuatro Fernando Alfonso de Córdoba, el Ayuntamiento aprobó por unanimidad que sobre él recayera la responsabilidad de desplazarse a la corte y dar cumplimiento a la solicitud municipal, transmitiéndosela personalmente al soberano castellano.

A Fernando Alfonso le desagradaba profundamente tener que distanciarse de su esposa pero no tuvo más remedio que cumplir con su encargo. Partió, por lo tanto, muy entristecido, si bien confiando en el honor y la lealtad de sus primos y de hecho, solicitó a los comendadores calatravos que cuidaran de su esposa.

Las gestiones cortesanas se fueron complicando y Fernando Alfonso se vio obligado a retrasar su retorno a Córdoba. Lo único que aminoraba un poco la tristeza de la separación de su esposa eran las cartas amorosas que ésta le enviaba, pues eran verdaderamente modélicas con respecto a la correspondencia que debe mediar entre marido y mujer enamorados y bien avenidos.

Al cabo de tres meses de ausencia las epístolas de Beatriz comenzaron a ser menos frecuentes y, al mismo tiempo Fernando Alfonso comenzó a recibir cartas de un fiel criado suyo en las que se le conminaba a regresar lo antes posible. Mientras permanecía en la corte, el caballero Veinticuatro recibió un día la visita del comendador Jorge, que venía desde Córdoba para solicitar una audiencia a Juan II. Los dos parientes hablaron encomiásticamente de Beatriz, alegrándose su marido de poseer tan buenas noticias sobre su mujer y de que los comendadores la tuvieran en tanta estima. Marchó Jorge a enrevistarse con el rey y después, regresó rápidamente a Córdoba.

Mientras tanto Fernando Alfonso recibió una orden del monarca por la cual le requería que se presentara ante él con la mayor urgencia. Una vez en su presencia, el rey le habló visiblemente enojado, y al preguntarle el caballero cordobés por el motivo, el rey le indicó que no se había comportado como un buen vasallo, ya que le había importado muy poco el anillo que le había regalado, ya que se lo había dado a su primo Jorge. El veinticuatro dijo al rey que no sabía a lo que éste se refería y entonces el rey le contestó que acababa de ver puesto en un dedo de su mano derecha el anillo que él mismo había regalado a Fernando Alfonso al despedirse de él. El caballero cordobés se puso lívido. De repente comprendió todo el bochorno que había caído sobre él. Se sintió invadido por la ira y un irrefrenable sentimiento de odio y de venganza le abrasó el corazón. Sólo pudo medio articular algunas palabras para decir que consideraba que guardar su anillo era lo mismo que guardar su honra, y que si había perdido la joya es que también había perdido el honor. Una vez dicho esto hincó su rodilla en tierra y solicitó al monarca permiso para poder recuperar ambas cosas, anillo y honor. El rey Juan entendió que algo grave le ocurría al digno caballero y le concedió licencia para regresar a su ciudad.
Iglesia de Santa Marina de Córdoba, frente a la que se alzaba la casona del caballero Veinticuatro Fernando Alfonso.

A lomos de su caballo, y sin tomarse más descansos que los necesarios para que su cabalgadura pudiera continuar, el ofendido caballero veinticuatro llegó a su casona de Córdoba, que se alzaba frente a la iglesia de Santa Marina pues nada deseaba tanto como hallarse ante su hogar. Beatriz salió a su encuentro y se mostró más enamorada y encantadora que nunca, tanto, que Fernando Alfonso llegó a dudar de que la afrenta fuera cierta. Por ello decidió aguardar y comprobar si se había cometido contra él alguna villanía. El aspecto de la morada del caballero era digno y satisfactorio y se oían risas y canciones. Fernando Alfonso casi llegó a convencerse de que su mujer era inocente e incapaz de ninguna traición.

Al amanecer salió al jardín, donde le esperaba su fiel criado Rodrigo, y este le informó de la horrible verdad, que Beatriz y Jorge eran amantes y que en infinitas ocasiones habían mancillado el hogar y el lecho conyugal del veinticuatro de Córdoba. Lleno éste entonces de furia y de deseo de venganza, juró que vengaría su ofensa. Aquella misma noche organizó una partida de caza con el fin de probar a sus primos, los comendadores calatravos. Tal y como él esperaba, ninguno de los dos quisieron formar parte de la expedición cinegética, con el pretexto de que tenían asuntos urgentes pendientes en la ciudad. Entonces Fernando Alfonso simuló ir solo a la partida de caza, dejándoles a ellos en libertad de obrar como quisieran.

En cuanto el caballero veinticuatro partió de cacería, se reunieron en uno de los salones Beatriz y una prima suya con la que compartía secretos y pecados, y con las damas se hallaron también los caballeros calatravos, Jorge, amante de la señora de la casa, y Fernando Alfonso, amante de la prima. Cenaron los cuatro y bailaron al son de un laúd, tañido con maestría por los jóvenes y alocados comendadores. Mientras tanto, el veinticuatro se deslizaba sigilosamente por el jardín y se dedicó a espiar a los culpables y a esperar el momento propicio para vengarse. Cuando las dos parejas de amantes dieron por terminada su alegre reunión, amabas parejas se retiraron a sendos aposentos de la casa. Ése era el momento que aguardaba el ofendido esposo de Beatriz. Con la velocidad de un rayo entró en el cuarto donde se hallaban su esposa y el comendador Jorge. Apuñaló primero a su esposa con una daga y después, con su espada, mató al comendador, que ya corría en busca de la suya. Seguidamente, entró Fernando Alfonso en la habitación de su otro primo y los mató a él y a la prima de su ya fallecida esposa.

Las ramificaciones de esta leyenda son espantosas, ya que hay autores que aseguran que no pararon aquí las muertes, y que el caballero veinticuatro mató a cuantas personas se encontraban en su casa y conocían su deshonra. Cuando Fernando Alfonso hubo cumplido su venganza, despareció en la oscura noche, seguido de lu leal criado Rodrigo, para tratar de dar olvido a su tremenda desgracia, ocultándose en algún lugar lejano.

Los hechos demuestran que el rey Juan II de Castilla tuvo enseguida conocimiento de lo sucedido y que, a petición de la ciudad de Antequera, en cuyo cerco se distinguió valientemente el caballero Veinticuatro cordobés, se le concedió un indulto real en 1449 y a él se acogió el inmisericorde verdugo de su esposa y de sus desleales parientes. Según parece, jamás volvió a aparecer por la corte.

El 22 de abril de 1474 dictó testamento en la ciudad de Córdoba Fernando Alfonso de Córdoba, ante el escribano público de Córdoba Fernán Gómez. Dicho testamento comienza así:

"Yo Fernando Alfonso, vasallo de nuestro señor el rey, y su veinticuatro de la muy noble ciudad de Córdoba, hijo mayor de Alfonso Fernández que Dios haya, Veinticuatro que fue en la dicha ciudad, vecino que so en la collación de Santa Marina de la dicha ciudad de Córdoba..."

Cuatro años después de haber otorgado testamento el famoso personaje, en 1478, falleció en su caserón del barrio cordobés de Santa Marina, y fue enterrado en la Capilla de San Antonio Abad de la Mezquita-Catedral de Córdoba. En ella descansan también los restos mortales de su segunda esposa.
Influjo de la leyenda de los comendadores de Córdoba en la literatura [editar]

Existe en la literatura española una obra de gran alcance, debida a la pluma de Lope de Vega y que es considerada como "comedia famosa". Su título es [[Los comendadores de Córdoba u honor desagraviado]]. La obra fue impresa en Madrid en 1609 en la Parte Segunda de las comedias de Lope de Vega. Años más tarde Marcelino Menéndez Pelayo la incluyó en el tomo XI de las Obras de Lope de Vega, editadas por la Real Academia Española. El argumento del drama escrito por Lope de Vega no presenta diferencias trascendentales con la leyenda que le dio origen. Conviene destacar que en una de las escenas iniciales del drama está contenida una de las más bellas interpretaciones poéticas sobre los caballos cordobeses.

El terrible crimen cometido por Fernando Alfonso de Córdoba fue enseguida recogido en la poesía popular. El ropavejero Antón de Montoro escribió unas octavas reales sobre el tema y un poeta anónimo compuso una canción, poco después de ocurrido el trágico suceso, que el pueblo cordobés se apresuró a difundir:

"Los comendadores / por mi mal os vi / ¡Yo vi a vosotros / vosotros a mi¡ / ¡Al comienzo malo / de mis amores, / convidó Fernando / los comendadores ...¡"

Historia y leyenda en torno al Alcázar de Córdoba

"El Alcázar descrito por Ibn Baskuwal es el mismo designado por algunos autores antiguos como Balat Ludriq (Palacio de Rodrigo), no porque lo hubiera construido sino porque cuando fue vencido por los árabes y su reino conquistado, como supieron que le servia de residencia cada vez que venía a Córdoba, le llamaron por su nombre. No se sabe por quién fue construido, pero la opinión más generalizada entre los ayam/s (Cristianos o bárbaros) es que fue uno de los antiguos reyes que vivió en el castillo de al-Mudawwar (Almodóvar), fue quien lo construyó.

Y cuentan lo siguiente: un día, yendo el rey de caza, llegó a un lugar a donde más tarde fue construida Córdoba, que en aquel entonces era un desierto o ruina ('jarab’); el Sitio ocupado por el alcázar estaba cubierto por impenetrable maleza. Cerca de este lugar el rey soltó su halcón favorito, el cual se elevó al campo que más tarde llamó kudyat Abu Ubadat (Monte o peña de Abu 'Ubaydat); pasándolo y descendiendo en la espesura, el halcón voló en busca de una perdiz. Siguió el rey hasta perderlo de vista pero no viéndolo aparecer y temiendo se hubiera enredado entre las ramas y se hallase en la imposibilidad de moverse, el rey ordenó cortar la maleza. Mientras su gente se encargaba de cortar la maleza fue descubierta la cúspide de un magnífico edificio de asombrosa estructura, construido con grandes bloques de piedra unidos entre si con plomo fundido. El rey, añade Ibn Baskuwal, que era un hombre inteligente y emprendedor, ordenó inmediatamente que se excavara alrededor y el edificio fue rápidamente descubierto en toda su extensión. Continuando su trabajo, los obreros llegaron a los cimientos, los cuales se encontraban sumergidos en agua sobre un lecho de pequeñas piedrecitas, puestas allí por un antiguo procedimiento. Cuando el rey vio esto, dijo: "No hay duda que esta obra es de algún famoso monarca y debo reconstruirlo."

Ordenó que este edificio fuese reintegrado a su estado primitivo; hízolo habitable y desde entonces lo visitó a menudo como cualquiera de sus castillos reales. Cada vez que hacía una excursión por su kura o pasaba cerca de él alguna expedición militar, residía en él durante algún tiempo. Esto indujo a muchos de sus súbditos a establecerse en la vecindad y así, poco a poco, se construyó la ciudad de Córdoba, quedando el alcázar en su centro, el cual, desde entonces, fue morada de los reyes que se sucedieron. Acampó en él Ludriq cuando marchó a su encuentro con los árabes en Shiduna..."

* Documento núm. 295 Aparece en "Anales de la Córdoba musulmana" de Antonio Arjona Castro. Publicaciones del Monte de Piedad y Caja de Ahorros de Córdoba. Córdoba 1982.

El avaro judío

Un hombre, pobremente vestido, está sentado delante de una mesa. La habitación está casi vacía, salvo por la silla donde se sienta, un tablón desgastado que le sirve de mesa y una vieja arqueta en el suelo. Frente a él, en la mesa, amontona monedas de oro y joyas a medida que los cuenta.

Llaman a la puerta. Se apresura a guardarlo todo en la arqueta antes de salir a la puerta. Allí hay una mujer, que angustiada, comienza a contarle su historia. Es pobre, apenas le queda nada y no tiene qué comer. Necesita dinero. El ávaro la mira en silencio, sin responder. No le impresiona la historia. La ha oido cientos de veces y la respuesta es siempre la misma.

- ¿Qué puede ofrecerme a cambio? - “Nada tengo, señor, salvo mi casa” - "Eso valdrá" responde, haciendole saber los términos del acuerdo.

La mujer, al oir el alto interés que tendrá que pagar, comienza a llorar y suplica no sea tan severo. El responde que nada puede hacer: es un negocio y lo demás, no le importa. Después guarda silencio. La mujer, finalmente, se ve vencida, y asiente con la cabeza. El redacta el papel; ella lo firma, hecho lo cual, se dirige con gesto cansado al interior de la casa: se escucha el abrir y cerrar de puertas y al cabo de unos minutos, vuelve el ávaro con el dinero prometido. Ella lo toma, le entrega el papel y se marcha.

El viejo, al verla salir, retoma su trabajo. Saca el dinero y lo cuenta. Una vez terminado, lo anota en un pequeño libro que guarda en el arcón, de donde saca una bolsa donde introduce el dinero. Lo toma y marcha a guardarlo. Mientras baja las escaleras del inmenso sótano donde guarda su riqueza, piensa en lo cansado que está, y murmura que, pese a todo, debe seguir con el negocio, aún no es bastante su riqueza.

Al subir, encuentra a su hija. Una mujer joven, casi una niña. Se dirije a la cocina, a preparar la cena. El viejo, de nuevo en la habitación, apaga la vela, para ahorrar y se sienta. Apenas han pasado unos momentos cuando su hija lo llama. Hay un caballero en la puerta que pregunta por ti, le dice. Muy bien, ahora lo atiendo. Ella asiente y se marcha. Sale al zaguán donde un hombre joven lo espera. Al verlo, desaparece la sonrisa de su rostro, dando a entender el profundo desagrado que el viejo le provoca.

- Tenga buena noche, señor - Aquí tienes tu dinero. Cuentalo si quieres, dice, a modo de respuesta. - Eso no es necesario, señor. Espero que su merced haya recordado el interés que fijamos y lo haya incluido. - Por supuesto. Di mi palabra, y ahora cumplo. Entregamé el papel que le firmé y acabemos con esto, dice agriamente.

El viejo, sin responder el tiende el papel. El caballero lo toma con gesto violento, da media vuelta y sin despedirse, sale de la casa.

El viejo lo observa mientras se marcha. Y después, con una sonrisa, se vuelve hacia el saco que el caballero ha dejado en el suelo. Intenta cogerlo, pero es demasiado pesado. Por varias veces lo intenta, sin éxito. Finalmente, decide llamar a su hija.

Ella, siempre solícita, escucha atentamente a su padre. Nunca ha bajado al sótano, y trata de memorizar las instrucciones. Finalmente, toma la vela y se dirije a la entrada. Levanta la tapa y se adentra por el hueco de las escaleras. Al llegar a bajo, repite las instrucciones: a la derecha, después a la izquierda... así, recorre varios pasillos. De pronto, se entremece y mira alrededor asustada. Una corriente de aire apaga la vela y queda a oscuras en medio del laberinto. Duda entre seguir o regresar, y a tientas, busca el camino de vuelta, pero la oscuridad y el miedo la traicionan y no encuentra el camino. Finalmente, comienza a llamar a su padre. Pero la respuesta que obtiene es el eco de su propia voz. Espera, pero nada ocurre. Se desespera y empieza a gritar y gritar....

El viejo, mira intranquilo el hueco del sótano. Debía haber regresado ya, piensa... y es entonces cuando escucha la voz que lo llama... Toma una vela y baja con rapidez. Se mueve con agilidad por los pasillos, pero cada vez que se acerca a la voz, esta suena en otra parte o se vuelve lejana... así las horas pasan y el viejo, cada vez más desesperado, busca sin cesar. Finalmente, decide pedir ayuda. El sitio es demasiado grande y por eso no la encuentra, dice intentando tranquilizarse.

Una vez en la calle, comienza a gritar a sus vecinos “¡ayuda!”. Estos, sonnolientos, se asoman a la ventana para ver qué ocurre. Al verle ponen cara de desagrado, la mayoría vuelve adentro, pero algunos, deciden bajar. El viejo, intentando parecer sereno, les cuenta:

- Mi hija bajó anoche al sótano y no regresó. La he buscado toda la noche, pero no consigo encontrarla; es demasiado grande para una sola persona. Si tuvierais a bien ayudarme...

Los vecinos se miran extrañados. Cómo puede una persona perderse en un sótano -se preguntan. El viejo les responde:

- En realidad, es una red de pequeñas galerías, casi un laberinto. Tiene tantas galerías y pasillos que es fácil desorientarse y perderse dentro: es por esto que yo solo no puedo. Les ruego....

Suenan de nuevo murmullos, pero una voz se levanta sobre el resto y dice: "Vamos"

Al oirlo, todo el mundo calla y le sigue hacia la casa del anciano. Allí, toman tantas velas y candiles pueden y bajan al sótano, dónde comienzan a buscar. Comienzan llamando a la muchacha, pero al oir la débil voz, callan y escuchan. Se mueven de un lado a otro, incansables. Las horas pasan y el viejo está cada vez más alterado. Finalmente, los oye que suben todos, y suspira aliviado. Pronto, su cara se torna en mueca a ver que vuelven sin la niña.

- "Es imposible, señor. La vez se acerca y se aleja de nosotros. Quizá haya salido ya, y lo que hemos oido sea el eco" - Pero eso no es posible. Yo estuve aquí todo el rato, y nadie entró ni salió, salvo sus mercedes...

Sin más respuesta que un encogerse de hombros y un “lo siento”, el grupo sale de la casa.

Allí queda el viejo solo.

Es de noche, y el viejo, como cada noche, se sienta en su sillón. Pero ya no cuenta el dinero. Sólo escucha, aterrorizado, angustiado, la voz que día tras día, al caer la noche, comienza a sonar, llamandole a gritos.

Siglo XX

viernes, 28 de mayo de 2010

En 1904 se hizo coincidir con la Feria, una Exposición Regional de Industria y Arte a petición de Carlos Carbonell y Morand. Es en ésta década cuando acaeció en la Feria un gran incendio que destruyó un gran número de tiendas y baracas, perdiendo los comerciantes e industriales todo cuanto habían invertido ahí.

El 25 de mayo de 1910, tuvo lugar en Córdoba la primera demostración de aviación, realizada por René Barrier y René Simón. Debido a una gran tormenta, sólo pudieron realizar un vuelo ese mismo día, dejando el resto para el día siguiente. Estos festejos no se celebraron en el propio Paseo de la Victoria, sino en el aeródromo de Turruñuelos. En 1911 se repitió un espectáculo aéreo por parte de Tizzier.

En el año 1924, y coincidiendo con la llegada de José Cruz Conde a la alcaldía del Ayuntamiento de Córdoba, se produce la primera acometida de electricidad para ser utilizada en la Feria, apareciendo las primeras casetas particulares. La crónica recoge que durante ese año, se instalaron millares de lámparas con pantallas de papel de colores, pendientes de cordones, cruzaban todas las direcciones los pasos, como guirnaldas de flores luminosas, dándole un aspecto verdaderamente fantástico. Durante este año se celebró el concurso de reinas de los barrios, para rendir homenaje a la belleza de la mujer cordobesa.
Atracción de feria

"...en el llano donde hoy se asientan los jardines del Duque de Rivas, se instalaban las barracas de espectáculos, las buñolerías, cerrado el marco por la larga fila de casetas de juguetes, de dulcerías y de joyas, que se extendían también por la otra acera del Paseo de la Victoria"(...)"Se decoraba vistosa y artísticamente la Puerta de Gallegos, y de noche, la iluminación menos espléndida que ahora, envolvía el paraje en un tono un tanto crepuscular y poético de noche serena y andaluza bajo el plenilunio del florido Mayo..."

Siglo XIX

En el año 1820 la Feria adquiere un emplazamiento definitivo en el Campo de la Victoria (Jardines de la Victoria)

En el año 1852, siendo alcalde el Duque de Hornachuelos, hizo igualar a un modelo todas las tiendas, según su clase

En 1855 la Feria se celebra entre los días 7 de mayo y 10 de mayo, hecho que desencantó a la población, no repitiéndose el experimento, y volviendo el año siguiente a las mismas fechas tradicionales.

En 1890, se aprueba el cambio al 25 de mayo por petición de la Hermandad de Labradores pero es revocado al año siguiente, hasta que en el año 1905, se decide que será la fecha del 25 de mayo la que prevalezca, así hasta nuestros días.

En 1896, en las primeras horas de la noche del 24 de mayo se produjo un incendio desde una barraca, extendiendose por toda el recinto Ferial quedado practicamente destruido. No hubo que lamentar víctimas ninguna, pero cundió el pánico en toda la ciudad.

Se recoge una crónica publicada en el Diario Córdoba sobre las casetas de finales del siglo XIX.

“La iniciativa particular no acusó nunca en Córdoba afición para instalar casetas en el ferial, como sucedía en Sevilla en el siglo XIX.

Sin embargo, en las postrimerías del siglo, una de las múltiples sociedades de carácter recreativo que existían entonces concibió la idea de levantar una caseta para baile, a la que se denominó con el nombre de “Tienda del Amor”, iniciativa que tuvo un gran éxito. Durante las noches de feria, se vio concurridísima. Abundaban las muchachas ataviadas con mantones de Manila.

Algunos años después instalaron otras el Ayuntamiento, el Cìrculo de la Amistad y el Club Guerrita, contribuyendo mucho al ornato y esplendor de la Feria.

En la del Club Guerrita, durante bastantes años, celebraron los socios un banquete anual al terminar la becerrada a la mujer cordobesa, y que constituía, sin duda , uno de los más brillantes espectáculos que se han venido celebrando sin interrupción hasta la muerte del “Califa”.

Un año gozó de gran popularidad la que fue denominada “Tienda de la Calderas”. Un grupo de jóvenes de buen humor la construyó utilizando gran número de calderas, los bailes en ella celebrados hasta final de los festejos, estuvieron muy animados.

Más tarde, el Circulo de la Amistad decidió construir una caseta de hierro y mampostería, que a la vez sirviera de lugar de reunión para sus socios durante el verano, estructura existente hasta nuestros días”.


Igualmente se recoge en el Diario Córdoba esta reseña sobre aquellas tiendas hoy llamadas casetas de finales del siglo XIX.

“Si creemos a los viejos cronistas de las postrimerías del siglo XIX hubo en la feria una caseta de baile llamada “Tienda del Amor”, a la que acudieron nuestras bisabuelas engalanadas con el garboso mantón de Manila, castiza prenda que ha sido destronada por el más liviano vestido de faralaes.

Sería interminable la relación de las casetas que dieron fama a nuestra Feria de Nuestra Señora de la Salud. En primer lugar hay que situar a la del Círculo de la Amistad, mencionando a las que ya no han vuelto a ser instaladas, la del Club Guerrita, la de Los Periodistas que representaban a un Cortijo que diseñó el arquitecto Enrique Tienda, o la "Venta Mona" de la marquesa del Merito"

Origen

El origen de la Feria de Nuestra Señora de la Salud se encuentra en el 5 de agosto de 1284, el rey Don Sancho IV concede el privilegio al Concejo de Córdoba para que pudieran celebrarse dos veces al año, una Feria de ganado, empezando una el día de Cincuesma y otra el primero de Cuaresma, debiendo durar quince días cada una:

"Sepan cuantos esta carta vieren como Yo Don Sancho, por la gracia de Dios, Rey de Castilla, de Toledo, de Leon, de Galicia, de Sevilla, de Córdoba, de Murcia, de Jaen, de los Algarbes, de Algecira, por hacer bien y merced al Concejo de Córdoba, é por muchos servicios que me han fecho, tengo por bien que fagan feria en Córdoba dos veces en el año, la una que comience el dia de cinquesma, y la otra el dia primero de cuaresma, y que dure cada feria quince dias; é cualesquier que á esta feria vinieren con sus mercanderías mando que vengan salvos y seguros, é ninguno no sea osado de les facer tuerto, fuerza ni mal á ellos ni á sus cosas, dando sus dichos dó los hubieren á dar: otrosí tengo por bien que aquellos que vinieren á la feria que non den portazgo segun en Córdoba en los quince dias que durare la feria, y que usen en estas ferias, segn que usan en las otras villas del mio reino en que facen ferias. E mando y defiendo que ninguno no sea osado de les ir contra esto en ninguna manera, ca cualquier que lo ficiese pecharme hia en pena mil maravedís de la moneda nueva, é demas al cuerpo é á cuanto que hobiese me tornaria por ello. Y desto les mandé dar esta mi carta con mi sello colgado. Dada en Sevilla á cinco dias de Agosto, Era de mil trescientos veinte y dos años. Yo Semon Perez la fice escrebir por mandado del rey."

En el año 1422, la feria de Cincuesma comienza a celebrarse con carácter fijo en los primeros días de mayo. En el año 1492, los Reyes Católicos confirman la celebración de ambas ferias, el primer día de Cuaresma, y el primero de mayo. Es en el año 1556, cuando Felipe II confirma el privilegio real otorgado por el Rey Don Sancho II.

En el año 1665, frente a la Puerta de Sevilla, dos labradores encuentran la imagen de una pequeña virgen en un pozo, cuyas aguas dicen devuelven la salud a todos aquellos enfermos que la beban. Para conmemoración del hallazgo, se erige una pequeña ermita en las inmediaciones, y se transforma en Feria a celebrarse en los primeros días de Pentecostés.

En el año 1790 la feria se reduce hasta las 10 de la noche por orden real, tras algunos alborotos registrados por noctámbulos. Es en el año 1803, cuando la feria se traslada frente de la Puerta de Gallegos, para acercarla a la plaza de toros sita en el Campo de la Merced.

Estadio Municipal “El Arcángel”

sábado, 22 de mayo de 2010


Estadio actual Año de inauguración: 1993
Dimensiones: 105 x 70 metros
Capacidad: 18.280 espectadores
Remodelación: 2004 - ?
Dirección: Avda. del Arcángel s/n Córdoba

El Nuevo Estadio Municipal “El Arcángel” fue inaugurado el 7 de Noviembre de 1993 con el partido Córdoba Club de Fútbol-Real Club Recreativo de Huelva, correspondiente al campeonato nacional de Liga en Segunda División B en la temporada 1993-94. Sería el cordobesista Valentín quién consiguiera el primer gol en el nuevo campo. El recinto se construyó en El Arenal, junto a la Ribera del río Guadalquivir, apenas a 500 metros de su antiguo emplazamiento. La inauguración de la instalación municipal se llevó a cabo estando en la alcaldía de la ciudad D. Herminio Trigo Aguilar.

No obstante, su puesta de largo “oficial” se produjo el 8 de Febrero de 1994, con un festival de partidos que, en primer término, enfrentó al Córdoba contra el FC Barcelona B, y que, como plato fuerte, los aficionados disfrutaron de un FC Barcelona-Borussia de Dortmund, que por aquel entonces era de los mejores encuentros que se podían ver a nivel internacional, con dos equipos recientemente proclamados campeones de Europa.

Desde entonces, momentos felices y otros no tanto se han vivido en el coliseo blanquiverde. Quedarán para la historia partidos amistosos como un Real Madrid-Sheffield Wednesday, Córdoba-Valencia, aquella liguilla de 1999 en la que se consiguió el ansiado ascenso a 2ª tras 16 años de dura lucha, aquella “reentré” en la categoría de plata ante el Sporting de Gijón con más de 13.000 espectadores, el Córdoba-Las Palmas en el que se dieron cita 16.700 espectadores (cuando la capacidad de espectadores sentados era de 15.500), y un partido amistoso disputado por España ante la selección de Japón (1-0, con gol de Baraja), que servía de preparación para el Mundial 2002 de Corea y Japón.

Fuente:http://www.cordobacf.com

Cuerpo Técnico 2009/10

entrenador

Lucas Alcaraz (Luis Lucas Alcaraz González)
Lugar de nacimiento: Granada
Fecha de nacimiento: 21/06/1966
Procedencia: Recreativo de Huelva
Temporadas en el club: 1 ª temporada


2º entrenador
Pierini (Alessandro Pierini)
Lugar de nacimiento: Viareggio, Lucca (Italia)
Fecha de nacimiento: 22/03/1973
Procedencia: Córdoba CF
Temporadas en el club: 6 ª temporada


preparador físico
Juanpe (Juan Pedro Cabrera Cecilia)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 09/04/1984
Procedencia: Baena Atlético
Temporadas en el club: 1 ª temporada

Esaú (Esaú Sánchez Reina)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 04/08/1976
Procedencia: Córdoba B
Temporadas en el club: 6 ª temporada


entrenador de porteros
Jorge (Jorge Ramírez Fernández)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 16/01/1967
Procedencia: Córdoba CF
Temporadas en el club: 9 ª temporada

médico
Javier Bejarano (Antonio Javier Bejarano Rodríguez)
Lugar de nacimiento: Villanueva de Córdoba
Fecha de nacimiento: 11/04/1977
Procedencia: Ciclismo profesional
Temporadas en el club: 6 ª temporada


fisioterapeuta
Mariano Mansilla (Mariano Mansilla Sánchez)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 12/11/1979
Procedencia: Córdoba B
Temporadas en el club: 5 ª temporada

Sonia (Sonia Torres Echevarría)
Lugar de nacimiento: Valencia
Fecha de nacimiento: 28/03/1982
Temporadas en el club: 3 ª temporada


encargado de material
Márquez Campos (Rafael Márquez Campos)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 21/09/1946
Procedencia: Córdoba B
Temporadas en el club: 15 ª temporada

Pepillo (José Pedrosa Pacheco)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 09/11/1966
Procedencia: C.D. Figueroa
Temporadas en el club: 6 ª temporada

Delegado
Manolo Torralbo (Manuel Torralbo de Soto)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 29/11/1956
Temporadas en el club: 10 ª temporada

Plantilla 2009/2010

porteros

1 - Raúl Navas (Raúl Navas Paul)
Lugar de nacimiento: Cádiz
Fecha de nacimiento: 03/05/1978
Altura: 1,79
Peso: 78
Procedencia: C.D. Tenerife
Temporadas en el club: 2 ª temporada

13 - Alberto (Alberto García Cabrera)
Lugar de nacimiento: Barcelona
Fecha de nacimiento: 09/02/1985
Altura: 1,82
Peso: 77
Procedencia: Real Murcia
Temporadas en el club: 1 ª temporada

26 - Coca (Jesús Coca Noguerol)
Lugar de nacimiento: Almodóvar del Río (Córdoba)
Fecha de nacimiento: 22/05/1989
Altura: 1,85
Peso: 79
Procedencia: Real Madrid C
Temporadas en el club: 1 ª temporada


defensas
2 - David Lopes (David Junior Lopes)
Lugar de nacimiento: Maringa (Brasil)
Fecha de nacimiento: 19/07/1982
Altura: 1,90
Peso: 85
Procedencia: Terek Grozny
Temporadas en el club: 1 ª temporada

4 - Gaspar (Gaspar Gálvez Burgos)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 07/07/1979
Altura: 1,82
Peso: 77
Procedencia: Deportivo Alavés
Temporadas en el club: 2 ª temporada

5 - Javi Herreros (Javier Herreros Gorría)
Lugar de nacimiento: Autol (Logroño)
Fecha de nacimiento: 18/12/1984
Altura: 1,83
Peso: 71
Procedencia: Real Murcia
Temporadas en el club: 1 ª temporada

19 - Ceballos (Juan Carlos Ceballos Pinto)
Lugar de nacimiento: Barcelona
Fecha de nacimiento: 07/04/1983
Altura: 1,78
Peso: 75
Procedencia: Levante UD
Temporadas en el club: 2 ª temporada

24 - Agus (Agustín García Iñiguez)
Lugar de nacimiento: Bonete (Albacete)
Fecha de nacimiento: 03/05/1985
Altura: 1,86
Peso: 82
Procedencia: Real Madrid Castilla
Temporadas en el club: 1 ª temporada

14 - Richy (Ricardo Álvarez Puig)
Lugar de nacimiento: Coruxo (Pontevedra)
Fecha de nacimiento: 11/09/1984
Altura: 1,84
Peso: 80
Procedencia: Celta de Vigo
Temporadas en el club: 1 ª temporada

12 - Gerardo (Gerardo García León)
Lugar de nacimiento: Sevilla
Fecha de nacimiento: 07/12/1974
Altura: 1,72
Peso: 69
Procedencia: Real Sociedad
Temporadas en el club: 1 ª temporada


centrocampistas
18 - Jorge Luque (Jorge Luque García)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 08/03/1981
Altura: 1,75
Peso: 71
Procedencia: Xerez
Temporadas en el club: 1 ª temporada

6 - Rueda (Jesús Rueda Ambrosio)
Lugar de nacimiento: Badajoz
Fecha de nacimiento: 19/02/1987
Altura: 1,81
Peso: 78
Procedencia: Real Valladolid
Temporadas en el club: 1 ª temporada

7 - Arteaga (David Pérez Arteaga)
Lugar de nacimiento: Sevilla
Fecha de nacimiento: 01/12/1981
Altura: 1,67
Peso: 66
Procedencia: Écija Balompié
Temporadas en el club: 4 ª temporada

21 - Javi Flores (Javier Flores Santacruz)
Lugar de nacimiento: Córdoba
Fecha de nacimiento: 09/02/1986
Altura: 1,70
Peso: 64
Procedencia: Córdoba CF
Temporadas en el club: 5 ª temporada

22 - Cabrera (José Luis Cabrera Cava)
Lugar de nacimiento: Madrid
Fecha de nacimiento: 10/05/1982
Altura: 1,93
Peso: 83
Procedencia: Deportivo Alavés
Temporadas en el club: 1 ª temporada

15 - Carpintero (Santiago Carpintero Fernández)
Lugar de nacimiento: León
Fecha de nacimiento: 28/09/1976
Altura: 1,80
Peso: 75
Procedencia: Málaga C.F.
Temporadas en el club: 2 ª temporada

8 - José Vega (José Vega Díez)
Lugar de nacimiento: Jerez de la Frontera (Cádiz)
Fecha de nacimiento: 10/04/1981
Altura: 1,76
Peso: 71
Procedencia: Elche C.F.
Temporadas en el club: 2 ª temporada

23 - Dañobeitia (Mikel Dañobeitia Martín)
Lugar de nacimiento: Barakaldo (Vizcaya)
Fecha de nacimiento: 05/03/1986
Altura: 1,79
Peso: 76
Procedencia: Salamanca
Temporadas en el club: 1 ª temporada

25 - Scotti (Diego Scotti Ponce de León)
Lugar de nacimiento: Montevideo
Fecha de nacimiento: 14/01/1977
Altura: 1,80
Peso: 75
Procedencia: Racing Club Montevideo
Temporadas en el club: 1 ª temporada

3 - Lauren (Laureano Bisan Etame-Mayer)
Lugar de nacimiento: Londi Kribi (Camerún)
Fecha de nacimiento: 19/01/1977
Altura: 1,80
Peso: 74
Procedencia: Portsmouth
Temporadas en el club: 1 ª temporada


delanteros
20 - Lizio (Damian Emmanuel Lizio)
Lugar de nacimiento: Florida (Buenos Aires)
Fecha de nacimiento: 30/06/1989
Altura: 1,67
Peso: 65
Procedencia: River Plate
Temporadas en el club: 1 ª temporada

9 - Savoia (Gustavo Humberto Savoia)
Lugar de nacimiento: Reconquista (Argentina)
Fecha de nacimiento: 21/08/1981
Altura: 1,85
Peso: 81
Procedencia: Ponte Preta
Temporadas en el club: 1 ª temporada

17 - Simon (Ándras Simon)
Lugar de nacimiento: Salgotarjian (Hungría)
Fecha de nacimiento: 30/03/1990
Altura: 1,83
Peso: 70
Procedencia: Liverpool F.C.
Temporadas en el club: 1 ª temporada

11 - Asen (Jaime Asensio de la Fuente)
Lugar de nacimiento: Madrid
Fecha de nacimiento: 07/10/1978
Altura: 1,80
Peso: 77
Procedencia: C.F. Extremadura
Temporadas en el club: 4 ª temporada

10 - Pepe Díaz (José Díaz Sánchez)
Lugar de nacimiento: Almodóvar del Río (Córdoba)
Fecha de nacimiento: 20/04/1980
Altura: 1,73
Peso: 69
Procedencia: Écija Balompié
Temporadas en el club: 2 ª temporada

16 - Juanjo (Juan José Expósito Ruiz)
Lugar de nacimiento: Santander
Fecha de nacimiento: 28/10/1985
Altura: 1,85
Peso: 76
Procedencia: Racing de Santander
Temporadas en el club: 1 ª temporada

Uniforme

viernes, 21 de mayo de 2010

* Uniforme titular: Equipación blanquiverde formada por camiseta con franjas verticales blancas y verdes, con pantalón blanco y medias blancas, con tres franjas horizontales verdes.
* Uniforme suplente: Camiseta negra con una cruz amarilla en el pecho, pantalón amarillo con ribetes en negro. Medias amarillas con tres franjas horizontales negras.
* Uniforme suplente 2: Camiseta azul marino con dos franjas en el costado, una azul claro y otra blanca. Pantalón azul marino con rayas en el lateral azul claro y blanco. Medias azul marino.

Récord en Primera División de España

A pesar de haber permanecido sólo 8 temporadas en la máxima categoría del fútbol español, el Córdoba posee un récord difícil de batir, y es que en la temporada 1964/1965, el equipo blanquiverde tan sólo encajó 2 goles en los 15 partidos de Liga que disputó como local. El primero lo marcó Di Stéfano, que por entonces militaba en el RCD Español, mientras que el segundo, para más inri, fue obra de Ricardo Costa en propia puerta en el partido frente al Zaragoza. En aquella temporada, ningún equipo derrotó al Córdoba en el Arcángel. El Córdoba resultó esa temporada 5º en la clasificación y no jugó competición europea, a la que tenía derecho, por no haber en la ciudad una feria internacional de muestras. La Copa de Europa era para los campeones de Liga y la Copa de Ferias para los cinco primeros clasificados.

Sólo el Pontevedra CF pudo igualar en la temporada 1968/1969 la hazaña del Córdoba de encajar sólo 2 goles en casa en toda la liga.

Historia

En los años veinte había dos clubes en la ciudad de Córdoba, el Sporting Fútbol Club de Córdoba, también conocido con el sobre nombre de Córdoba Sociedad Constructora, por la afinidad de las siglas (Córdoba S.C.), fundado en 1920 por Luis Ruiz de Castañeda. Jugaba en los jardines del Duque de Rivas (La Pérgola), luego lo hizo en el Estadio de América; y la Sociedad Deportiva Electromecánicas que lo hacía en las afueras de la ciudad, en terrenos de la fábrica Sociedad Española de Construcciones Electromecánicas(SECEM. Ambos equipos militaban en categoría regional.

En 1928 coincidiendo con la primera liga oficial española, se unen ambos clubes y forman el Racing Fútbol Club de Córdoba, Jerónimo Fernández fue su presidente, vestía camiseta a franjas verticales alternas blancas y verdes. En la primera liga oficial quedó fuera, pero militó en categoría regional desde la temporada 1929-30 hasta la 1934-35, en la 1935-36 militó en Tercera División. Tras el paréntesis de la Guerra Civil española (1936 a 1939), reaparece en la temporada 1939-40. Jugaba en el Estadio América, terrenos del antiguo cuartel de Artillería de Córdoba.

En 1944 por la prohibición de llevar nombres extranjerizantes, se adapta cambiando el suyo por el de Club Deportivo Córdoba, militando en Tercera División desde la temporada 1940-41 hasta la 1943-44.

Con posterioridad, en 1944, vuelve a cambiar el nombre, y esta vez lo hace por el de Real Club Deportivo Córdoba, a propuesta de su presidente, José Ramón de la Lastra y Hoces, de ideología monárquica, consiguiendo la concesión de los organismos oficiales pertinentes, tomando los colores blanquiverdes del Racing e incorporando la corona real al escudo. Asciende a Segunda División, por primera vez, en la temporada 1944-45, coincidiendo con la inauguración, en 1945, del Estadio del Arcángel, propiedad del presidente, pasando a jugar allí. Tres temporadas duró el equipo en Segunda, desde la 1945-46 hasta la 1947-48, para ascender de nuevo la 1948-49. En la temporada 1952-53 pierde la categoría y en la 1953-54 juega en Tercera División, antes de desaparecer. El club se auto disuelve en una asamblea extraordinaria convocada para tal fin, en julio de 1954. El motivo la acumulación de deudas, el fútbol cordobés tuvo entonces las miras puestas en el recién nacido y saneado San Álvaro.

En el día de San Rafael, el 24 de octubre de 1951, se fundó, el Club Deportivo San Álvaro de Córdoba, tuvo de nodriza al Constancia (club modesto cordobes de una fábrica de gaseosas que había en la ciudad), militando en categoría local la temporada 1951-52, en provincial la 1952-53 y en Tercera División la 1953-54, coincidiendo esa temporada con el extinguido R.C.D. Córdoba en la categoría, resultando al final de la liga por delante del club decano. Jugaban los dos en El Estadio San Eulogio. Actual Estadio del C.D. Fray Albino. En 1954 al desaparecer el otro club de la ciudad, el R.C.D. Córdoba, cambió de nombre por el de Córdoba Club de Fútbol, el color blanco de la camiseta, por los colores y escudo del R.C.D. Córdoba, con una corona no Real parecida a la ducal, todo a imagen y semejanza del club disuelto. Aunando esfuerzos, tanto el San Álvaro como de la directiva del disuelto R.C.D. Córdoba, donde Martín Moreno, presidente del San Álvaro deposita toda la confianza en Manuel Franco, presidente del desaparecido R.C.D. Córdoba, y máximo impulsor del proyecto.

Hay que dejar muy claro que el C.D. San Alvaro y el Córdoba C.F. son el mismo club con igual número identificativo en la Federación Andaluza de Fútbol. En los archivos del club existe un escrito, con fecha 7 de agosto de 1954, por el que la FAF autoriza al C.D. San Alvaro a cambiar de nombre, escudo y colores por los solicitados previamente a dicho organismo con fecha 2 de agosto de 1954. Aprobados en una Asamblea extraordinaria convocada para tal fin.